Capítulo 14: "I love you, superstar".

"Tengo miedo de ser herida, no quiero actuar como si no me importara

cuanto en realidad, estoy muriendo por dentro".

Mejor me acostaré, sí, mejor me acuesto, veo algo de televisión, y ya va a estar todo mejor. Tengo que encontrar alguna manera de olvidarme de esto.

Destendí las sábanas y las colchas, a la vez me arropé con las mismas. Prendí la televisión con el objetivo de limpiar mi mente completamente. Justo estaba en un canal de música, estaban pasando "Boyfriend" al ver el artista, era Justin Bieber, al parecer la había sacado hoy.

Ya no se sentía ruido, lo más probable era que todos ya se habían ido. Escuché unos pasos cerca de mi habitación. Pero no le dí importancia, seguro era Justin para ír a su cuarto.

(A la mañana siguiente)

Sentí que alguien estaba a mi par, observandome, yo solamente abrí los ojos ¡y sí! era Justin.

—Bieber ¿qué te he dicho de que entrarás acá sin permiso? — dije con una mirada de desaprobación.

—Jones, calma, sólo venía a avisar que con los chicos queríamos ir al Mcdonald's y te queríamos preguntar, si bueno ¿quieres ir?

—Ya, pues ¿luego irán al Pinkberry?

—Sí, tienes 1 hora para cambiarte, luego bajas que estoy en la sala esperándote.

So, a ver ¿que me pongo?  ¿vestido? no, demasiado elegante y no iría para la ocasión.

Decidí ponerme esto:

Sentí que tocaban la puerta desesperadamente. Abrí, era Justin.

—Cambio de planes —dijo sin mirarte— ¡wow! por los santos cielos, luces hermosa.

—Gracias —respondí sonrojada— ¿que cambio de planes? 

—Pues ¿vistes ese lugar, cerca de la 19th street, donde hay karaoke? 

—Sí ¿ese lugar donde comes pizzas y hay bowling? sí, ya me ubico.

—Bueno, ahora iremos allá, baja porque ya están todos.

Justin me agarró de la mano, mientras bajamos las escaleras, y me sonrió, pero cuando estábamos en los últimos escalones, me soltó la mano.

Cuando llegamos todos se me quedaron mirando.

—Hola chicos —dije— ¿en qué nos vamos?

—En mi Hummer —respondió Caitlin.

Mmm, iban a ir: Gracielle, Cielo, Geral, Tamara, Kristen, Caitlin, luego de los chicos iban a ir todos. Me quedé sumergida en mis pensamientos, fui a retirar mi iPhone que estaba encima de la mesada, al frente del televisor. Para cuando llegué ya estaban todos afuera de la puerta. Salí de la casa, y cerré con seguro. No había encontrado las llaves adentro, supongo que Justin las tendría, o sino ¿quien sabe el lío que tendríamos que hacer para entrar devuelta? pero, bueno, ahora ese no es el punto.

Cuando salí, ya estaban todos en la Hummer de Caitlin. Aceleré el paso, al llegar me subí con total tranquilidad en la parte de atrás, me tocó sentarme a la par de Christian, y al otro lado mío estaba Chaz. 

(Mientras Caitlin manejaba)

—Hola —me saludó Chaz.

—Hola ¿tú eres el chico que saludé junto con Ryan en el recreo? ¿cierto?

—Sí, así es ¿tu eres la novia de Justin? ¿no?

—¡No! el sólo es mi mejor amigo ¿porqué lo dices?

—Sólo note como se miraban, y todo eso, parecen novios a simple vista.

—No bromees, algo con él nunca pasaría, aunque quisiera, no estoy diciendo que quisiera, solamente digo que el es una estrella júvenil, con millones de chicas a su alrededor y no creo que se fuera a fijar en mí, veamos tu eres su mejor amigo desde la infancia y tú sabes como es él, y no, no me gusta él

—Sigue negándolo, y verás como suceden las cosas de rápido.

Me dí la vuelta, de los asientos traseros, estaba esa ilusa, sí estaba Cielo, mi "mejor amiga" con esa estúpida, ash. Sí, mi mejor amiga estaba con Gracielle Fander ¡eso no es amistad! ¡esta hablando con el enemigo! Es la peor traición que alguien en esta vida te podría hacer ¿porque a mí, ah? ¡Está bien! nos podremos haber peleado, pero... ¡qué cólera! Se supone que eramos "mejores amigas" y lo somos ¡ash! no sé, no sé.

En menos de lo pensado, ya habíamos llegado. Era algo así como un club, abrieron la puerta de la Hummer y salimos. Justin estaba tapado, para que no lo reconocieran, los chicos iban por su lado, y las chicas por el suyo, claro pero nos íbamos a sentar en la misma mesa

(Con Justin y los chicos)

—Bueno, ahora sí Justin, dinos lo que pasa entre tú y Emma —dijeron todos.

—Ya, les diré que sucede, somos mejores amigos —respondió Justin.

—Todos sabemos que estas que te estas muriendo por ella — dijo Ryan.

— Cayesen ¿ya? no pasa nada con ella, y otra cosa ¡no digan mi nombre! no quiero que nadie se venga a acercar acá —respondió Justin, pero esta vez con algo de furia.

—Pero no eres el único Justin en el planeta —dijo Chaz.

—Si sé, pero apenas me salvo con lo que llevo puesto —contestó él.

—Dios, Bieber ¡cuando cambiarás! —repitió Ryan.

—Si, pues, nunca cambiaré ¡no menciones mi apellido! —dijo otra vez Justin.

(Contigo y Tamara)

—¿De qué hablas con Bieber, cuando están en la casa? —preguntó ella.

—Nada, simplemente, apenas es un "hola y chau" —dije mintiendo.

—Ya, vamos dime ¡no le voy a contar a nadie! —contestó.

—Hoy día estas de curiosa, eh —dije, para desviar un poco el tema.

—Sí — rió— créeme que estoy re curiosa.

—Pues no sé, creo que me pasa algo, es raro —dije insinuandole que sentía algo por Justin.

—¡Aw, más linda! pues, haz algo

—No lo sé, es demasiado temprano ¿no crees?

—Dale tiempo al tiempo —contestó ella.

Luego de eso nos fuimos con los demás, el club era un lugar lindo, elegimos una de las mesas del fondo, esas que están aisladas de los demás. Y les digo, es mejor que estar en todo el ruido ¿no?

—¿tienen hambre? —preguntó Justin.

—No sé, pues, compra unos refrescos —contestamos todos, claro, excepto Justin.

Narra Justin:

Pues a ver... tengo 100 dólares, compraré 10 Red Bull y una bolsa de papas fritas ¿Lays? sí mejor. No creo que quieran algo más.

Justo cuando iba para volver con las cosas, se me acercó una chica ¿y si me descubrieron? espero que no, dios.

—Oye, tú, te pareces a Justin Bieber —me dijo.

—Ah, sí, pues me lo han dicho un par de veces —suspiré.

Luego de decir eso la chica se retiró, y seguí caminando hacia la mesa dónde estaba hace unos minutos.

—¿Qué tienes? ¿por qué te ríes tanto? —preguntó Caitlin.

—Pues, miren, estaba en la barra pidiendo las Red Bull y las papas fritas —dejando las cosas en la mesa— bueno, se acercó una chica y me dijo "Te pareces a Justin Bieber" y se fue.

—Dios, Bieber —rió Emma— y bueno ¿qué hacemos?

—¿Porqué no van al karaoke? —sugerí.

Todos fuimos, nos sentamos en unos sofás que habían allí, había una pantalla grande, ahí debías de poner los nombres de todos, y iba a elegir quien debería cantar, y así.

—Ya, pero yo no voy a jugar —dije.

—¿por qué? —preguntó Chaz.

—Porque si canto, todos se darían cuenta de quien soy ¿o qué? ¿quieren salir traumados por los gritos, o salir normales y tranquilos? —dije.

—Preferimos la segunda opción —respondieron todos.

Después de 3 minutos de espera de que la pantallita esa eligiera los nombres, salió Emma. ¡Genial! ahora sí la podré escuchar cantar, de una vez por todas.

—Bueno... Emma, saliste tú y debes de cantar "Superstar — Taylor Swift" —dije anunciando.

—¿QUÉ? — exclamé sorprendida y a la vez sonrojada.

Fin de la narración de Justin.

Narras tú (Emma):

Pasé, pero con algo de vergüenza y en estado de shock, ya que yo sí cantaba, y en lo que a mí concierne, lo hacía bien.

[Acá les dejo la canción, así sepan de lo que hablo http://www.youtube.com/watch?v=znzN19zeYIw&feature=fvst)

Cuando terminé de cantar la canción todos me miraban y a la vez aplaudían. Bajé, y me senté a la par de Justin, ese era mi sitio, aparte era mi mejor amigo.

—Emma, que mala suerte que no pueda cantar —dijo Justin.

—¿Por qué? sería un placer escuchar tu voz —dije— tu sexy voz —susurré esto último—

—Porque te pensaba dedicar una canción —contestó el.

—¡Wuh! que tierno, los enamorados —dijeron todos, excepto Justin y yo.

—¿qué pasa? ¿somos mejores amigos? ¿no? —respondió Justin.

Me pasaba algo con Justin, algo que no quería admitir, yo tan sólo me límite a sonreír.

—Sí solo... mejores amigos —dije eso con tono triste, pero gracias al cielo, no se noto.

—¿Lo ven? hasta Emma lo dice —dijo Justin.

Fin de la narración.

Narra Justin:

No sé que me pasa, Emma es tan perfecta, y no sé ¡me tiene loco! la amo, la amo, debería decir lo que siento por ella, pero aún así, no es nada seguro por ahora ¿y si me quiere solo por mi fama? ¡ash! no sé.

—Estoy aburrido —dijo Ryan.

—¿que quieres hacer? —pregunté.

—¡ya sé! hay que jugar a la botella borracha —dijo Christian.

—Ya, pero miren, sólo se vale con las personas de acá y ¡sin besos! ¿ya? —dije.

—¡Oh dios! ¿que acaso tienes 3 añitos? —dijo Ryan— ¿tanto miedo te da un beso?

Fin de la narración de Justin.

(Comienzan a jugar)

Narras tú:

En una de esas le toca a Ryan mandarme a mí.

—¿verdad o reto? —dijo Ryan.

—Ya, pues reto —contesté.

Elijo reto, ya que si elegía "verdad" me preguntarían cualquier idiotez, bueno ya, volvamos al juego.

—Ya, besa a Chaz, linda —dijo Ryan.

—¿cómo dices que dijiste? —exclamé.

—Hay otra forma, no necesitamos juntar los labios —dijo Chaz, el cual estaba a mi otra par, es decir, era Justin de mi lado izquierdo y Chaz del derecho.

—¿cómo? —cuestione sonrojada.

Chaz me jalo y me besó, pero claro no fue un beso, el puso su mano en el entremedio. Pero al tener mi cabello suelto, el cual tapaba mi cara, sí parecía un beso.

—Ya ¡fue demasiado, paren! —exclamaron Caitlin y Justin al unísono.

Salí del "beso" con la cara más roja que un tomate, al igual que Chaz. Caitlin me miró con cara de "te odio" y Justin me miraba cómo diciendo "¿porqué con el?".

Luego le tocó a Caitlin mandar a Geral.

—Bueno, Geral, besa a mi hermanito, pero sin la mano por entremedio.

Geral se sonrojo, se notaba que sentía aunque sea una pequeña atracción por Chris, luego de unos segundos, Caitlin los junto a ambos, ése beso duró algo de cinco minutos.

—Ya, paren, o si quieren se van a un cuarto sólos —dijo Caitlin bromeando.

Todos reímos, en eso, era el turno de Christian, y Christian decidió mandar a Justin.

—Besa a Caitlin, pero claro, cómo hizo Ryan, con la mano entremedio.

Fin de la narración.

Narra Justin:

Haha, ahora sí, Emma y Chaz van a saber lo que se siente ¡dolor y celos! Luego del "beso" con Caitlin,  le tocaba a Geraldine mandar, ósea le tocaba a Geral mandarme a mí.

—A ver, Justin, besa, y sí hablo sin mano en medio a... ¡Emma! sí, a ella.

¡Buen reto Geraldine! te debo una, te debo una grande.

Fin de la narración.

Narras tú:

Escuché que mi celular sonaba ¡Sí! me salve.

—Esta sonando mi iPhone, voy a hablar, al rato vuelvo —dije.

—¿hola? —dije.

—Hola preciosa, soy Jake —escuché del otro lado del teléfono.

—¿qué pasa? —dije.

—Pues, te quería avisar esto, linda. Cómo ya tu sabes, mi sueño era ir a Alaska a reportar

—Sí, lo sé ¿que pasó con eso?

—Bueno, pues, ahora voy y no te podré hablar en mucho tiempo, a lo mucho 3 años.

—¿hablas en serio? —dije apunto de derramar lágrimas.

—Sí, totalmente —dijo.

Tan sólo decidí cortarle, no estaba preparada para escuchar estas noticias, al menos, no ahora. Se podría decir que mi vida en estos momentos estaba como decir "viva, viva la fiesta" pero sabía que eso no duraría, era obvio que no duraría.

(Con los chicos)

—¿no piensa volver a entrar? —preguntó Gracielle.

—A ver, iré donde ella —dijo Justin.

(Donde tú)

Decidí irme para afuera, era una calle segura, más bien London era seguro de por sí. Afuera era tipo una plaza, con bancos y toda la cosa. Decidí sentarme en un banco que había, bajo un árbol.

—Te dije que jamás te dejaría sola —dijo Justin y te abrazó por detrás.

—Justin...

—No llores, eres hermosa, nadie merece tus lágrimas ¿ya? — dijo Justin.

—Justin, yo la quiero, la quiero acá a mi costado, la necesito acá conmigo —dije, eso probablemente sonaría confuso para Justin.

—¿a quién? dime, por favor, que no te entiendo —dijo el con un gesto de preocupación.

—A mi madre ¿sabes? necesito a una autoridad para ser feliz.

Capítulo 13: "No deberías haber preguntado, me duele".

"El adiós no es lo que me duele, tan sólo mi memoria sigue con los malditos

recuerdos..."

—Vete a la mierda Justin, no jódas ¿ya? — le dije— no vaya a ser que tus amigos desesperen.

—¿celosa? —preguntó con tono picaron.

—¿De Beyonce? pff, no mames —dije— ¿celoso de Harry?

Narra Justin:

Me límite a mirarla con cara de odio. ¡Wow! está más buena que Megan Fox, pero cuando quiere es una odiosa.. pero mejor para mí ¿no? aparte lo admito, me tiene babeando en este mismo instante.

—No, ya me voy— le informé.

—Mmm, ok —ella me miró rara y confundida— ¿te ayudo? —me sorprendió que me preguntará eso.

—No gracias, puedo solo —sonreí.

Lleve exactamente 6 latas de Red Bull a la sala, Emma salió por atrás mio, supongo que iba a su habitación, al parecer, sí, eso creo.

(En la sala)

Cuando llegué a la sala, todos estaban que me miraban frunciendo el ceño, más bien, una expresión de "¿qué mierda estabas haciendo?" por suerte Emma ya estaba en las últimas gradas, mejor dicho, ya había llegado al segundo piso.

—¿que hacías? —preguntaron todos.

Soy adivino, al parecer.

—¿Yo? pues, pues —me puse nervioso, pero al instante me acorde de las 6 botellas de Red Bull que tenía en mano— solamente fui a buscar las bebidas.

Les repartí las botellas a cada uno y me tiré en uno de los lugares vacios, a la par de Ryan.

—¿Seguro que estabas trayendo las Red bull's y nada más? —preguntó Ryan.

—Si, más que seguro. —dije.

¡Ryan! estúpido, cómo siempre metiendo la pata en dónde no debería, aparte yo no debo andar dando explicaciones de MI vida personal y privada ¿o si? no lo creo ¿o acaso alguno anda ventilando sus vidas privadas por doquier? no lo creo.

—Solamente digo, tal vez estabas con, no sé... ¿Emma? hace rato la llamaste a que vaya contigo —dijo.

—Solamente ponle "play" a la película, abran las Red Bull, acomoden su trasero, y lo más importante, no jodan —dije hablando claramente, palabra por palabra.

Agarré el control del DVD, y puse "Play" todos me miraban como si hubiera tirado las torres gemelas. Bueno, sí estaba hablando con Emma ¿pero porque mierda le iba a decir a ellos si van a joderme toda mi vida con eso? ¿ah? pero bueno, chicas tan sexys como ella no se ven todos los días, es la chica más hermosa que he visto, y eso que he visto muchas chicas alrededor de mi carrera, más bien, he visto varias chicas alrededor mío, acosándome, más bien.

—¡Justin! —gritaron todos.

Sentí que gritaban mi nombre desesperadamente, así que volteé.

—¿qué pasa? les he dicho que no jodan —dije irritado.

—Te estoy hablando —dijo Christian.

—No, ya nada —respondió —solamente quería comprobar algo.

Rodé los ojos, o como dirían "le sobre". Me joden para comprobar no sé que mierda, y me sacan de mis profundos y lindos pensamientos. ¡Oh god!

Fin de la narración.

(En tu habitación)

Narra Emma:

¡Eran las horas! llegué a mi habitación, Cielo ya no estaba, tampoco iba a ir a su casa o llamarla para pedirle perdón, lo siento, pero mi orgullo, mi estúpido orgullo no lo permite, además, no es mi problema que la niña se enoje por un almohadazo a Ryan ¡dios, que madure! Será mi mejor amiga, pero de todos modos, es demasiado enojona, no puedo decir nada, porque la niña ya se enojo, es decir, nadie puede enojarse por nada, porque cada enojo tiene una razón ¿no? ¡que mundo idiota en el que vivimos! Prefiero guardar mi orgullo y dignidad en vez de ir corriendo a rogar por un maldito perdón, si después de todo, ella tiene la culpa ¿no? yo solamente la jodia, y ella fue la que tiro la almohada. Yo no la obligué a nada, después de todo.

—Bueno, a ver... —dije hablando conmigo misma.

Nuevamente, ví el reloj, ese que estaba en el velador, eran las 12:00 am, en Puerto Rico serían eso de las 4 de la tarde, y ellos estaban viendo su película, y yo acá, aburrida sin nada que hacer, no tengo ganas de ir y joderle la noche a Justin, sólamente he hablado poco con sus amigos, claro salvo Ryan y Christian, pero creo que eso no cuenta como "conocer a fondo a los amigos de tu mejor amigo" ¿o si? bueno, ese no es el punto.

Agarré mi pijama, algo cómodo.

Listo, mejor ¿cierto? ahora me siento mucho más cómoda, bueno la otra si era cómoda, pero todos me miraban con cara de babosos, realmente, me incomodaba tremendamente ¿soy sexy, no? pregúntenle a Christian, o a Justin y ahí hablamos. Ya, basta con las boberías. 

Mmm, ahora ¿qué hago? no quiero ver televisión, eso hago siempre. Mi laptop, mmm, tal vez. Pero... mejor no, me da mucha vagancia prenderla, ponerle la clave, enchufar el cargador, conectarme en la red de internet ¡mucho trabajo para una sóla persona! ya sé, iré con mi mejor amiga, mejor conocida como "música".

Tomé mi iPod, el cual estaba en el velador, junto con los audífonos, que tenía al costado de mi cama, no era por nada, pero esta cama era muy cómoda, amaba eso.

Puse la opción llama "Shuffle" es decir que salgan canciones al azar, comencé a escuchar varias canciones, me concentraba más en todo lo que había sucedido hoy que en la canción, por más que fuera mi favorita, no era el momento para prestarle atención.

Hoy, quizás fue uno de los mejores días de mi corta vida, si pero es que ¡ash! no puedo quitarme a Justin de la cabeza, ni a Christian, es como si sintiera algo por ambos ¡ASH! pero ahora estoy más concentrada en Justin, realmente, el era perfecto, sus ojos, eso sí que es lo mejor que tiene. Eran unas mezclas de marrones café y un toque de verde con algo de gris ¿raro, no? lo sé.

Sentí que alguien asomaba los pasos a mi habitación.

—¿Quién mierda...

—¡a mi no me hablas así, pendeja! —dijo una voz de mujer.

¡Agh! Gracielle, una chica que he conocido hace unas semanas acá, y lamentablemente, le caigo pésimamente mal, y ella también, me cae pésimamente mal. ¿Que hacía ella acá? ah, ya, seguro venía a joder a los chicos, para ser más específicos, a joder a Christian, si señores, la puta quiere a Christian.

—¿y tú que quieres? —le dije irritada— ah y mi vida, yo hablo así —le dije— y si no te gusta jódete, o mejor quedate y tápate los oídos, tu presencia no me jode, mientras no me jodas.

—¡Ash! cómo sea —dijo mirándose la manicura, al parece se había pintado las uñas hace rato.

—Oh, y... ¿qué querías aparte de joderme? —le pregunté.

—Christian me dijo que te dijera sí querías comer pizza, porque van a llamar a Kentucky, entonces ¿quieres? —me dijo apoyándose en la puerta, esperando mi respuesta.

—Mmm, sí, sí —le respondí— ¿sabes?

—¿qué pasa? —preguntó.

—Tú y Chris son iguales —le dije.

—¿eh? —preguntó sin entender.

—Ya, ese no es el punto, al grano ¿desde cuando, tú, Gracielle me hablas de tan "buena" manera?

—No, mi amor —contestó— eso se llama civilización, gente que crece con descencia y calma, no en un zoologico, como tú, perra —insultándome.

—¿Disculpa? —le pregunté.

—Lo que escuchaste, Emma —me afirmó todo.

—Si yo fuera tú, correría lo más fuerte que pueda —le advertí.

—¿eh? —dijo otra vez, la huevona, sin entender.

Salí a correr detrás de ella, ella salió disparada ¿quien mierda se cree ella para decirme eso? ¿yo? ¿nacer en un zoológico? En Puerto Rico podré haberme quedado en albergues por largo tiempo, pero recibía educación de la mejor, otra cosa es que no ponga en práctica mi educación, esa puta me va a escuchar.

Fin de la narración.

Narra Gracielle:

Creo que no debí de hablarle de manera tan grosera, pero Emma me tiene harta. Pero ahora lo más probable es que este pensando en matarme, sí, aquí y ahora.

Emma estaba llena de furia, me quería matar, era obvio, creo que me pasé un poquito de la raya al decirle eso, lo admito. Cuando quedamos abajo, Emma estaba cerca, demasiado para ser precisos, hasta sentía su respiración de cansancio. No pude correr tan rápido, ya que llevaba puestos tacones altos.

Corrí por la sala, por cualquier sitio y justo Kristen apareció con Caitlin, Cielo, Luz y Tamara. Al escuchar los gritos, se asomaron los chicos a ver lo que sucedía. ¿Porqué mierda tenía que aparecer Chris? ahora va a pensar huevadas de mí, va a pensar que soy un animal, es mi culpa por andar jodiendo a Emma, y ahora.. ¿qué hago? todos voltearon a vernos, pero cuando volteé, Emma no estaba ¿había corrido como burro desesperado para que ella no estuviera detrás mío? ¡Ash!

—¿Pasa algo, Gracielle? —preguntaron todos al unísono.

—No me pasa nada —dije nerviosa— estaba... buscando, em.. algo, ajá, ya lo encontré.

Dije eso, y caminé hacia las escaleras, todos se me quedaron mirando, luego de mataron de la risa, yo tan sólo me hice la loca y seguí subiendo las gradas de las escaleras. Decidí volver a la habitación de Emma, dios ¡que vergüenza!

Fin de la narración.

Narra Emma:

Dios, morí de risa con la súper escenita de la huevona de Gracielle. Es patético cómo la gente te juzga y finalmente, la gente es la que termina como ridícula, no tú.

Ví que alguien se acercaba a mi habitación, seguramente era... ya "hablando de roma, el rey se asoma".

—¿Pasa algo? —pregunté sonriendo.

—¡Claro que sí! —respondió exaltada.

—¿Qué paso? —dije haciéndome la preocupada.

—¡Me dejaste como una bruta mal parada! —gritó.

—No linda, eso te sale natural, deberías de saberlo —dije con un tono apenado— además, seré de un zoológico, cómo tu dices, pero lo que si sé, "mi amor" es que soy mucho más inteligente que tú, Gracielle —dije burlándome. 

Gracielle rió sarcásticamente.

—¡Que risa! —exclamó con sarcásmo.

—Ya, bueno, tú no me conoces, por eso no tienes ni el más mínimo derecho a decirme que soy de un zoológico. —le dije— prácticamente simplemente me has visto y te he caído mal, no sabes de donde soy, no sabes como soy, no sabes como es mi vida, no sabes nada... así que me harías un favor si sólamente te callarás, o mejor aún si te largarás de mi preciada vista —le dije, haciendole con la mano un signo de "adiós".

—No necesito conocerte para saber cómo eres —dijo asegurando.

—Ya, créeme que no sabes nada, ni la mínima cosa puedes llegar a saber sobre mí, como dije, tú no me conoces —repetí esto una vez más.

—Sí, tal vez no sé todo, pero sé lo suficiente —dijo.

—Haber, haber ¿qué sabes?

—Pues sé que estas aquí desde hace unos meses, en esta ciudad, para ser precisos ¿porqué no te quedaste con algunos de tus padres, en vez de venir a joderles la vida a todos acá? ¿o qué? ¿ellos tampoco te quieren? oh, pobre de ti, ja ¡ilusa!

Ya, esta puta me harto ¡justo tenía que venir a hablar de eso! ¿eh? no pude evitar que se me armara un nudo en la garganta y que mis ojos se cristalizaran, solté una lágrima. Nadie sabía nada de mí, literalmente. Ryan solamente, era el único. Esto me duele demasiado... ¿porqué tuve que perderlo todo? ¿porque? 

—¡Lo ves! — me dijo— ni tus propios padres han quedado quedarse contigo, de seguro eres una plaga.

—No son las cosas cómo tu dices, ya cállate, por favor —dije entre lágrimas.

—Ajá, entonces... ¿porque lloras? eres una marica. —dijo poniéndose superior a mí.

—Sabes, creo que ayer te ví en televisión, en un canal —dije.

—¡Oh! ¿en donde, en donde? —dijo Gracielle emocionada.

—¡EN ANIMAL PLANET! perra —grité todo esto.

Grité lo último tan fuerte que se había escuchado por toda la casa.

—Si, seré una perra, una zorra, todo lo que se te cante la maldita mierda, pero al menos, tengo padres y ellos me aman —dijo, nuevamente con nivel de superioridad.

—Ajá, cómo quieras perra, si tus padres de verdad te quisieran y si fueras tan "civilizada" cómo dices que eres no estarías acá jodiendome —dije enojada, y llorando a la vez.

—Pues... mis padres me dejan salir, son los mejores ¿sabes? al menos los tengo, ah —dijo echandome en cara el fondo de pantalla de su celular, ahí estaba Gracielle y su familia.

—Ajá, me acabo de dar cuenta de algo ¿sabes?

—¿qué sucede? —preguntó.

—Eres adoptada, se nota, no eres nada igual a tus padres, tú eres fea —dije actuando.

—¡NO ES CIERTO! —lloriqueaba — ¡no mientas, Emma!

—Claro que es cierto, se nota.

—¡No mientas! —volvió a repetir.

—Pensé que cuando te veías al espejo notabas tu fealdad, pensé que tus padres eran iguales, pero no, ahora me doy cuenta que no eres más que una mimada adoptada —dije mirándola con desprecio.

Gracielle se largó a llorar ¡Wow! pienso que soy una genial actriz, debería ganarme un Oscar, o como mínimo un Grammy.

—Dí la verdad, te lo suplico —dijo — se que no debí decir las huevadas esas, pero, no me mientas.

—No miento, es cierto —le repetí— ah, y tienes un granito por ahí.

—¡Es imposible! tengo la cara perfecta, como mi mamá.

—Ajá —le dije con sarcásmo— si te refieres al tonto cabello de rubia y tus ojos verdes, sal a la calle, en Inglaterra hay millonadas de personas iguales.

—No mientas, Emma —dijo con voz de niña malcriada.

—¡Grace! —gritó una chica del primer piso, supuse que sería Kristen, es una de las pocas amigas que Gracielle tiene.

Rodé los ojos, miré a Gracielle, vi que se estaba limpiando el delineador que se le había corrido, y se quedó parada mirándome, como esperando algo. No le pedí perdón a Cielo, menos le pediré perdón a esta perra.

—Solo decía, ve, te llaman —le dije— y si Christian te pregunta algo sobre mí dile que tú fuiste la que me malograste la noche.

—¡Te odio Emma Jones! te odio con mi alma.

—Aw, yo también te amo, ahora sí, vete —dije cerrándole la puerta en la cara.

Gracielle salió con los ojos llorosos, con su mano apoyada en su pecho, y mirándome con una cara de mierda.

Fin de la narración.

Narra Gracielle:

Bajé en la sala, todos estaban peleando por la última botella de Red Bull que quedaba, yo no podía hacer nada contra mis ojos llorosos, todos voltearon a verme con cara de asco, se podría decir y volvieron a concentrarse en la pizza. Yo no presté atención a eso, solamente quería hablar con Kris, necesitaba un consejo de alguien, bah, ella era mi única amiga, se podría decir.

—¿Qué te sucede, Grace? —preguntó Kristen.

—Emma Jones, eso sucede —contesté molesta.

—¿ahora que sucedió? —rodó los ojos.

—Es que, simplemente, es una estúpida sin escrúpulos —contesté.

—¿Qué hizo? —me pregunto Kristen tocándome el hombro.

—Me dijo que era adoptada y un montón de sonseras más.

—Pff, no le creas, sólamente te lo dice por jóder, nada serio

—Pero, no sé... —contesté.

—Ven, acompañame, solucionarás las cosas con Emma.

Kristen agarró mi mano, y me llevo nuevamente a la habitación de Emma, de esa arpía, de esa marciana estúpida.

(En la habitación de Emma)

Cuando llegamos a la habitación de esa arpía ella estaba con sus JustBeats, mirando al techo.

—I don't believe you baby, you don't have to call anymore, you're not sorry — exclamó la tonta de Emma.

¡Ven! hasta sin vernos ya me está tirando indirectas para que le pida perdón.

Fin de la narración.

Narra Emma:

Yo solamente estaba cantando "You're not sorry — Taylor Swift", pero ¡otra vez! vinieron a invadir mi habitación ¿que mierda quieren?

—¿qué? —grité histérica por la presencia de ambas.

—Ya, dile la verdad —dijo Kristen— ¿no te da pena su carita? —preguntó.

—No, no me da pena —confesé — ella me estaba insultando.

—Me dijiste perra, y además que era adoptada —se metió Gracielle donde no debería.

—Bueno, la primera cosa, de que eres perra, es verdad —dije— la segunda no es cierta, crédula.

Gracielle frunció el ceño.

—¡Niñita llorona! —me burlé de ella— aparte tu hiciste que yo me entristeciera primero.

Claro, no iba a decir que he estado llorando, si no me rebajaría al mismo nível de esa patética.

—Sólamente por decir que tus padres no te quieren, lo cual es cierto —insistió ella, haciendo berrinches, y más berrinches.

—¿Que sabes, ah? —le pregunté desafiándola— ¡NO SABES ABSOLUTAMENTE NADA DE MÍ!

—Si te quisieran en estos momentos estarías con ellos, no estaríamos nosotros acá, ya sabes eso —dijo ella.

—Vete, tú también Kristen —les ordené— Gracielle ¡déjame en paz! ¿quieres?

Me paré, las boté de mi cuarto, y una vez después de eso, cerré la puerta con seguro, no quería que volvieran a jóder, al menos, no ahora. ¿Porqué mierda tienen que mencionar a mis padres? Me duele recordar, me duele...